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Soy Rogelio Macías-Sánchez, de tantos años ya, que se me permite no decir cuántos. Soy mexicano y vivo en México país, médico cirujano de profesión, neurocirujano y neurólogo de especialidad. Ahora y por edad, soy neurólogo y neurocirujano en retiro. Soy maestro de mi especialidad en la Facultad de Medicina de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y un entusiasta de la difusión de la ciencia a la comunidad. Pero eso no es toda mi vida. Soy un amante fervoroso de la música clásica, actividad que fomento desde mi infancia. La vivo intensamente y procuro compartirla. Soy diletante en vivo y mucho disfruto, de la música grabada, mejor cuando es en compañía de almas gemelas para esto. Finalmente, amo la vida y la disfruto. Parte de ello es comer bien y beber mejor, es decir, moderado pero excelente. De aquí mi afición a los vinos y las cavas. Los conozco, los disfruto y me entusiasma compartir lo que conozco y lo que me gusta. Esta página pretende abrir una comunicación sobre los vinos, la música clásica y la neurología para profanos. Si es socorrida, el mérito será de ustedes. Diciembre de 2022

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jueves, 16 de septiembre de 2021

INTERMEZZO 23. FLORALIA DE MI COLONIA Y MI HOSPITAL






Bella portada, mala época para las camelinas.




















De mis hongos.

Nunca averiguaré si son comestibles.




















Los colores de la flor son por contraluz






















¡Campamocha fracasada!














¡Qué ordenaditas!, como para desfilar.




   Las Tetas, dignos guardianes del Occidente del
Valle de Guayangareo

lunes, 13 de septiembre de 2021

COGNICIÓN Y DEMENCIA


a relación es la función general del sistema nervioso y la COGNICIÓN es la función príncipe de dicho sistema en los humanos; su raíz etimológica es latina y significa conocer. Pero en el concepto antropológico actual, esa función es mucho más compleja que el sólo “darse cuenta de”, es el desarrollo emergente del conocimiento dentro de un grupo, que culmina con la sinergia del pensamiento y la acción. Algún tiempo se llamó inteligencia, pero esta es sólo un elemento de la cognición. El término engloba diferentes procesos como el aprendizaje, la atención, la memoria, el lenguaje, el razonamiento, la toma de decisiones, y otros más que forman parte del desarrollo intelectual y de la experiencia. También se le conoce como mente o pensamiento, pero siempre en sentido amplio.

Algunos elementos de la cognición son claramente identificables, mesurables y tienen una localización funcional claramente identificada en la corteza cerebral. Son GNOSIA, PRAXIA, MEMORIA, INTELIGENCIA y LENGUAJE, y son los que los médicos usamos para diagnosticar normalidad o anormalidad de la función cognitiva, aclarando que, para estas condiciones, la anormalidad sólo puede ser por defecto; nunca por exceso.

Gnosia es la capacidad de RECONOCER, es decir, identificar, clasificar y darle sentido y localización a los ítems recogidos por los sentidos, todos y cualquiera, no sólo los cinco tradicionalmente reconocidos. Requiere aprendizaje y memoria. Su falla se llama agnosia

Praxia es SABER HACER. La raíz etimológica de praxia es griega y significa llevar a cabo. Requiere aprendizaje y memoria. Su falla se llama apraxia.

Memoria es la capacidad de almacenar información procesada, indexarla y llamarla cuando se requiera. Su falla se llama amnesia.

Inteligencia implica la posesión de un sistema complejo de respuestas apropiadas al medio cambiante, la capacidad de improvisar. Dicho sistema debe de tener la capacidad de aprender.

Lenguaje es la capacidad de convertir palabras en ideas e ideas en palabras. Puede ser oral o escrito. Somos muchos quienes opinamos que esta es la función príncipe de la cognición humana, la que ha permitido el desarrollo exponencial de la especie comparado con el de todas las otras especies animales. También requiere aprendizaje y memoria. Su falla se llama afasia.

Ansiedad arriba -- Depresión abajo


De menor trascendencia es el estado de ánimo, que es una actitud o disposición en la vida emocional. No es una situación emocional transitoria; es un estado, una forma de permanecer, de estar, cuya duración es prolongada y destiñe sobre el resto del mundo psíquico. Sus fallas son ansiedad y depresión.



Todo esto se consuma sobre una base de conciencia, de estar despierto, de estar alerta, que es también una función reconocible y mesurable del sistema nervioso y de la que también se conocen sus localizaciones funcionales, las que no residen en la corteza cerebral, sino en estructuras profundas del cerebro y el tronco cerebral.

Todos estos, trabajando en armonía, constituyen la COGNICIÓN, función que muchos extrañamos seguir llamando mente o pensamiento.


Ahora bien, si a esa función príncipe se le agrega el condimento de las emociones, yo creo que estamos en presencia del ALMA misma.




Consideramos EMOCIÓN a la respuesta vegetativa, involuntaria pero consciente, de mayor o menor magnitud, ante sentimientos de placer, miedo o dolor.

Ahora bien, todo esto, como un todo, puede darse mal, hasta el grado de constituirse en un síndrome, condición clínica anormal y compleja, que suele ser el indicador de una enfermedad grave de fondo; se llama DEMENCIA. Es la manifestación de enfermedad de la función cognitiva y para afirmarla se requiere de falla de por lo menos dos de los elementos constitutivos primarios de la cognición.

El identificar DEMENCIA en una persona no es suficiente para establecer un tratamiento, cualquiera que sea; hay que buscar la causa. Hay varias, no muchísimas, pero suficientes como para constituirse en verdadero reto de la capacidad de un médico. Hay causas neurodegenerativas, como la Enfermedad de Alzheimer; por falla en la circulación sanguínea del cerebro, como la demencia vascular; por infección del cerebro por el VIH, virus responsable de la inmunodeficiencia humana (SIDA) y varias más. Hay enfermedades que simulan demencia y no lo son; son curables, como la hidrocefalia normotensa, algunos tumores benignos dentro del cráneo, algunas carencias vitamínicas crónicas y hasta la depresión.

Hasta aquí por hoy. En otra entrada diré, en extenso, de las causas de demencia.