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Soy Rogelio Macías-Sánchez, de tantos años ya, que se me permite no decir cuántos. Soy mexicano y vivo en México país, médico cirujano de profesión, neurocirujano y neurólogo de especialidad. Ahora y por edad, soy neurólogo y neurocirujano en retiro. Soy maestro de mi especialidad en la Facultad de Medicina de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y un entusiasta de la difusión de la ciencia a la comunidad. Pero eso no es toda mi vida. Soy un amante fervoroso de la música clásica, actividad que fomento desde mi infancia. La vivo intensamente y procuro compartirla. Soy diletante en vivo y mucho disfruto, de la música grabada, mejor cuando es en compañía de almas gemelas para esto. Finalmente, amo la vida y la disfruto. Parte de ello es comer bien y beber mejor, es decir, moderado pero excelente. De aquí mi afición a los vinos y las cavas. Los conozco, los disfruto y me entusiasma compartir lo que conozco y lo que me gusta. Esta página pretende abrir una comunicación sobre los vinos, la música clásica y la neurología para profanos. Si es socorrida, el mérito será de ustedes. Diciembre de 2022

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lunes, 28 de abril de 2025

DON QUIJOTE DE LA MANCHA, EN LA LITERATURA Y EN LA MÚSICA.








EL INGENIOSO HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA, de Don Miguel de Cervantes Saavedra, es el libro de ficción y de no ficción más leído en la historia de la humanidad. Esto se tiene calculado por la magnitud de las ventas universales, desde que esto se puede conocer. Hay quienes alegan que, a lo largo de la historia, se han vendido más ejemplares de la BIBLIA judeocristiana que del Quijote, lo cual puede ser cierto, pero de los ejemplares vendidos del Quijote, todos se han leído, en tanto que, de los ejemplares de la Biblia, la mayoría sirven como adorno colocados en atriles caros en las salas de las casas de creyentes ricos, que jamás han pasado una sola hoja de libro tan trascendente.

El Quijote, como cariñosamente le llamamos sus "fans", lo leí yo por vez primera el año de 1951, en un bello ejemplar que de Navidad me había regalado mi prima Rebeca Aurora; yo tenía trece años. Después, lo he leído hasta en ocho ocasiones, la última en el 2023, con más de ochenta años encima. En esta ocasión fue en una versión informática.

Ahora, el pasado viernes 25 de abril, volvimos a la Sala Tlaqná, recinto de la Orquesta Sinfónica de Xalapa, para estar en un concierto de temporada en el cual se interpretó, como obra final, Don Quijote, pieza sinfónica de Richard Strauss, que llevó como solistas a Ana Catalina Ruelas con la viola, llevando el papel de Sancho Panza, y Jiri Barta con el violonchelo, llevando el papel de Don Quijote de la Mancha. El director fue el titular, el maestro Martin Lebel.

¡Que estupenda pieza musical nos tocó vivir!, tan conforme de sentimientos musicales con los sentimientos originales de los personajes. La obra tiene una correspondencia absoluta entre el discurso musical y el verbal que, quienes conocemos bien la novela, identificamos de inmediato; recordamos el discurso de los personajes. Esto, en una belleza lírica incomparable.

Gracias a la vida, que me dejó vivirla tantos años, hasta que alcanzara yo a escuchar el Don Quijote de Richard Strauss y asociarlo en mis emociones mayores a El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha de Don Miguel de Cervantes Saavedra. No sigo, porque ya lloro.