Acerca de mí

Mi foto
Soy Rogelio Macías-Sánchez, de tantos años ya, que se me permite no decir cuántos. Soy mexicano y vivo en México país, médico cirujano de profesión, neurocirujano y neurólogo de especialidad. Ahora y por edad, soy neurólogo y neurocirujano en retiro. Soy maestro de mi especialidad en la Facultad de Medicina de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y un entusiasta de la difusión de la ciencia a la comunidad. Pero eso no es toda mi vida. Soy un amante fervoroso de la música clásica, actividad que fomento desde mi infancia. La vivo intensamente y procuro compartirla. Soy diletante en vivo y mucho disfruto, de la música grabada, mejor cuando es en compañía de almas gemelas para esto. Finalmente, amo la vida y la disfruto. Parte de ello es comer bien y beber mejor, es decir, moderado pero excelente. De aquí mi afición a los vinos y las cavas. Los conozco, los disfruto y me entusiasma compartir lo que conozco y lo que me gusta. Esta página pretende abrir una comunicación sobre los vinos, la música clásica y la neurología para profanos. Si es socorrida, el mérito será de ustedes. Diciembre de 2022

Seguidores

Archivo del Blog

lunes, 10 de abril de 2023

DE LOS TUMORES DEL CEREBRO.

Encéfalo normal
Vista lateral derecha

El cerebro es la estructura anatómica más alta del Sistema Nervioso. En su corteza, que es a su vez la unidad funcional más alta del cerebro, se procesa, hasta sus últimas consecuencias, la función de RELACIÓN, la más compleja y sofisticada del reino animal, en particular del homo sapiens sapiens. Esta especie, nosotros, hemos sido la única que ha modificado trascendentalmente la Naturaleza en aras de esa función suprema; nadie sabe como terminará eso. 


Esa función de relación se ejerce por la acción sincronizada de cien mil millones de neuronas     (100 000 000 000) que residen en la corteza cerebral y que la trabajan usando energía eléctrica de magnitud de microvoltios. No hay nada comparable en complejidad en el universo entero.

Pero esa corteza no actúa sola; requiere de información masiva que recibe de estructuras, llamémoslas inferiores por su localización anatómica; las hay subcorticales en el cerebro mismo y más allá del cerebro. También hay estructuras cerebrales subcorticales y más allá, para ajustar las indicaciones corticales de salida para la perfección de las acciones de movimiento. Son los tálamos (procesadores de la sensibilidad), los núcleos del sistema extrapiramidal (ajustadores del movimiento), el cerebelo y el tronco encefálico. Estos cuatro últimos con la corteza cerebral, forman el encéfalo, la estructura global del sistema nervioso que está dentro del cráneo. Dentro de la columna vertebral o raquis se aloja la médula espinal, la estructura más baja del Sistema Nervioso Central y la primera y la última, diciendo de funcionalidad.

Vista posterior del encéfalo y
 la médula espinal cervical.
A la izquierda se ven dos de las
meninges. La más exterior es 
la dura madre.










A ella y al tronco encefálico llega de primero la información del exterior a través de nervios sensitivos y de ella sale, a través de nervios motores, la indicación de movimiento y de secreción glandular. El conjunto de estos nervios, los espinales y los craneanos, constituye el Sistema Nervioso Periférico, que para esta entrada no tiene vela en el entierro.



Todo el Sistema Nervioso Central está cubierto por tres membranas, dos delgadas y una gruesa, que se llaman meninges. La exterior, la más gruesa, a la que se le confiere una función protectora, se llama dura madre.

Cortes coronales normales del encéfalo
                      En fresco               Con tinción especial
                                                de sustancia gris
----------------------------------------------------------

Ahora bien, todas las estructuras nerviosas y las meninges son susceptibles de enfermarse, ya sea que se degeneren, se inflamen o desarrollen tumores. En esta entrega nos referiremos a estos últimos. Les presento algunas fotografías de piezas anatómicas de cerebros afectados por tumores propios o de la dura madre.

      Glioblastoma multiforme                     Meduloblastoma
      Tumor frecuente en adultos               Tumor de niños   











          Meningioma                  Metástasis cerebral










Los tumores dentro del cráneo provocan dos grupos de síntomas:

1. Al crecer en forma anormal una masa dentro del cráneo, que es una cavidad rígida, aumenta la presión dentro de la misma, causando dolor de cabeza severo y progresivo, vómito y visión borrosa por hinchazón del nervio óptico. Esto se llama síndrome de hipertensión intracraneana y puede ser causa de muerte a corto plazo.

2. Signos focales al destruir el tumor parte de las redes neuronales necesarias para cumplir tal o cual función: disminución del movimiento o de la sensibilidad de algún segmento corporal, falla en las actividades mentales: memoria, orientación, lenguaje, razonamiento, etcétera, dificultades con el lenguaje e incluso ataques epilépticos. Esto no necesariamente es causa de muerte, pero sí de invalidez.

Ante algo como esto, hay que acudir, ¡ya!, con el médico especialista.


1 comentario: