ANÉCDOTA DE LOS VINOS ANÉCDOTA.

Anécdotas del vino son sustanciales a este blog, a pesar de que no soy vinicultor, comerciante de vinos o sommelier. Recolectándolas y publicándolas he dicho aquí de la ya larga historia del vino y comentado algunas anécdotas curiosas del mismo, todo basado en mi ya larga historia de buen aficionado por más de cincuenta años, sin intereses extraños.

Como mi  documentación es ajena a cualquier información profesional, siempre acudo a ella a través de páginas de empresas vinateras extranjeras que suelen tener blogs muy simpáticos de historia y anécdotas del vino. Así lo hice para esta entrega y lo primero que tecleé, o quise teclear, fue anecdotario. Iba yo a la mitad o poco más de la palabra, cuando se dio el resultado y se me apareció una página con el título de ANÉCDOTA. Pensé: “ya la hice”; le doy “click” y he aquí que me aparece una página completa con bellas ilustraciones de vinos mexicanos que se llaman ANÉCDOTA. Son de una empresa vitivinícola en el Valle de Santo Tomás en Ensenada, Baja California Norte y tienen una amplia variedad de vinos: tintos, blancos, rosados, azules, espumosos, secos, dulces, caros, baratos, etcétera, etcétera, además de dos enólogas con nombres encantadores.

Los vinos ANÉCDOTA nunca los he probado ni visto en las vinaterías que frecuento o frecuentaba, pero existen. Lo ocurrido y descrito líneas arriba es, en sí mismo, una anécdota digna de ser publicada como tal en este blog. Queda pues entonces como la "Anécdota de los vinos Anécdota"