La NEUROLOGÍA es la especialidad médica que se encarga del conocimiento del Sistema Nervioso (SN) y la atención de las enfermedades que lo afectan, que son muchas.
Como en cualquier especialidad del ejercicio médico, hay enfermedades leves y graves que lo pueden afectar. Las primeras no comprometen la vida o definitivamente su función; las segundas, SI. Estas últimas pueden presentarse en forma lenta y progresiva o en forma súbita. En este último caso constituyen una urgencia médica, porque de no resolverse pronto, pueden terminar, a corto plazo, en la muerte del sufriente o, por lo menos, en una incapacidad severa y permanente.
La función del sistema nervioso es la relación, que es la capacidad humana de percibir estímulos de su entorno y de su propio cuerpo y reaccionar adecuadamente ante ellos. Involucra la coordinación entre los órganos de los sentidos, el sistema endocrino y el aparato locomotor.
Las razones más frecuente para acudir al servicio de urgencias de un hospital calificado por síntomas neurológicos son:
1. La inconsciencia o estado de coma, que se caracteriza por inactividad espontánea y la falta de respuesta adecuada a estímulos externos. Es la condición de enfermedad neurológica más grave y su atención debe ser inmediata en un centro hospitalario que tenga los recursos necesarios para cualquier tipo de acción terapeútica, incluyendo la neurocirugía.
2. Crisis epilépticas. Son episodios autolimitados en los que se altera la función cerebral por una actividad, anormal por excesiva, de grupos de neuronas de la corteza cerebral. Los síntomas más frecuentes son inconsciencia y movimientos anormales (convulsiones), que pueden ser breves o prolongarse por horas. Pueden ser producidas por causas varias o no encontrarse alguna; puede ser una sola o muchas, pero siempre requiere atención en una sala de urgencias de un hospital calificado.
3. Alteraciones del estado mental. Estas se refieren a cambios en la conciencia, en el estado de conocimiento y/o en el comportamiento conductual. Son muy variadas estas alteraciones y muchas las causas posibles; su presentación puede ser lenta, pero también súbita.
4. Cefalea, que así llamamos los médicos al dolor de cabeza, que puede ser migraña, pero también el aviso de una hemorragia dentro del cráneo. Cuando es el aviso de una enfermedad grave, suele ser de presentación súbita, muy severa, acompañada de otros trastornos, como vómito o debilidad de algún segmento corporal y seguidas de pérdida de la conciencia.
5. Mareo o vértigo. Vértigo es la alucinación de movimiento rotatorio y el mareo es la alucinación de movimiento no rotatorio. En los dos casos puede acompañarse de vómito. Su presentación súbita, sin causa desencadenante alguna y de duración prolongada, puede ser signo de causa grave que los provoque. Amerita ser valorado en la sala de urgencias de un hospital calificado.
Ante un cuadro clínico súbito, de los mencionados arriba, no hay que "andarse por las ramas". Hay que llevar al sufriente a la sala de urgencias de un hospital calificado; puede ser algo grave, comprometedor de la vida.
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